Palestra Aguascalientes

Exhorta LARF al PAN a no Vivir Quejándose “de los Pocos Resultados” de los Gobiernos del PRI

10 enero 2012

“Superado ese proceso de expulsión, viciado de origen, mal fundado y peor motivado, nos toca hacer del PAN un partido que en vez de estarse quejando de todo, quejándose de los pocos resultados del actual gobierno estatal y municipal”

A continuación se transcribe el discurso de Luis Armando Reynoso Femat ofrecido durante la conferencia de prensa que ofreció la mañana de este lunes.

“El pasado miércoles (4 de enero), el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación revocó, de forma contundente y definitiva, el acto de expulsión del PAN del cual fui objeto, expulsión perpetrada por intereses no muy claros.

El tribunal consideró por unanimidad, repito: por unanimidad, que los argumentos del Consejo Nacional del PAN estuvieron mal fundados, mal motivados y peor comprobados.

Por lo anterior, los señores magistrados de la Sala Superior del órgano electoral, determinaron, cito: «Se revoca la resolución impugnada dictada por la Comisión de Orden del Consejo Nacional, y se vincula al Registro Nacional de Miembros del Partido Acción Nacional al cumplimiento de lo ordenado en esta ejecutoria para la restitución del actor como miembro activo de ese partido político».

Por ello, estas palabras que hoy vengo a expresarles quiero que sean en primer lugar un mensaje de agradecimiento a ustedes por haber venido, y un reconocimiento muy afectuoso a quienes desde distintos ámbitos me han expresado su solidaridad y apoyo, especialmente en los últimos doce meses; a quienes reconocen en mi persona el trabajo y la entrega que todo miembro del PAN debe mostrar, no se diga en el servicio a la ciudadanía, en el servicio al estado de Aguascalientes, por los ideales que todos conocemos.

En segundo lugar, expreso mi respeto y reconocimiento por la seriedad y profesionalismo que los señores magistrados han demostrado, al invalidar una decisión injusta, ciega y unilateral que lejos estaba de expresar el sentimiento de un instituto político;
más bien, y todos lo sabemos, era expresión de la envidia y el miedo de ciertas camarillas tenebrosas donde, desafortunadamente, en lugar de trabajar por el bien del partido, se conspira y se fabrican intrigas.

En tercer lugar, quiero que estas palabras sirvan para entregar un mensaje a quienes piensan que todavía estamos en la edad media, a esos que se equivocaron de partido político, y que no saben que Acción Nacional es el partido de la democracia, del respeto a la dignidad de las personas, de la tolerancia; ya lo dijo uno de los señores magistrados: un partido político no debe tener como fin la expulsión de sus militantes, sino privilegiar el análisis y la discusión de principios. No hacer de los partidos políticos un club de amigos; o en pocas palabras el Club de Tobi.

A esas personas en el PAN a las que hoy se da una justa lección, quiero decirles que se equivocaron respecto a mi persona, pues si pensaban que iba a quedarme sentado, viendo cómo acaban con el partido, saben que soy tenaz; que vengo apoyado por una trayectoria de logros y éxitos electorales que mucho han aportado al panismo local y al estado de Aguascalientes.

¿Y ellos, yo me pregunto, qué han aportado?

Hace medio año, en junio, acudí a la sede de mi partido político, el Partido Acción Nacional, para reunirme con simpatizantes y amigos panistas; el recibimiento que nos dieron fue hermoso e inconfundible en su significado: una puerta atrancada con cadenas y un concierto de bocinas de auto para que no se escucharan mis palabras.

Más claridad, no se le puede pedir a quien ostenta el cargo de Líder del Partido en la entidad: cadenas de cerrazón, provocar estridencia con tal de no escuchar, cerrarse y mandar callar. Ese es el lamentable estado en que está nuestro partido.

Esa es la dirigencia del PAN. Con eso queremos llegar a la próxima elección.

Ese fue la expresión más refinada del carácter de este dirigente y de quienes lo manipulan: «¡Pongan cadenas en las puertas, pongan policías, pero que no entre!». Trataron con desesperación de acallar un verdadero liderazgo que les acecha.

Por eso a este líder panista, le pido que se comporte a la altura de su cargo: porque un liderazgo implica resultados; el liderazgo implica reunir voluntades, unir personas; liderazgo significa honorabilidad, cumplir con el deber, mostrar integridad, no golpear ni mandar golpear personas.

Sobre todo, no se diga tratándose de un partido político, el liderazgo se ha de reflejar en el cumplimiento de las leyes, máxime tratándose de la decisión del máximo tribunal en cuestiones electorales.

Afortunadamente hoy, con mucho orgullo, con mucho ánimo, me reincorporo al panismo con todos mis derechos, con garantías y el apoyo de la ley, representando un capital político para Aguascalientes.

Los señores magistrados han dejado claro que el procedimiento está concluido. Estoy aquí para quedarme: para apoyar a quienes desean ver que el PAN se levante de nuevo, para incomodidad de quienes quieren hacer de él una cueva. Y que quede muy claro: Dejaré de participar en él hasta que lo estime conveniente, es decir hasta que lo decida yo y no otros.

Superado ese proceso de expulsión, viciado de origen, mal fundado y peor motivado, nos toca hacer del PAN un partido que en vez de estarse quejando de todo, quejándose de los pocos resultados del actual gobierno estatal y municipal, quejándose de los ataques, quejándose de los que con o sin razón lo critican, sea un partido que proponga y que construya sobre lo mucho que ya se ha logrado.

Al Partido Acción Nacional le he dado los más grandes triunfos de su historia en el estado, ahí están los números. Los logros de Luis Armando son logros panistas. Son logros del espíritu que mueve al partido.

La lista de aportaciones es innumerable, por hablar solo de algunos: está el mando único en materia de seguridad, que las autoridades estatales y federales reconocen como un acierto. Nosotros lo iniciamos y me siento orgulloso de eso.

La obra pública, desde la presidencia municipal y luego en el gobierno del estado; cambió más que en ningún otro período, la cara urbana del estado, dando un nuevo rostro a Aguascalientes: el Cristo Roto, el colector pluvial oriente, las nuevas instalaciones de la feria, los accesos a los municipios… Tantas que no habría tiempo de mencionar ni siquiera las más importantes como el gran avance del Hospital Miguel Hidalgo, que solamente se requiere voluntad y sensibilidad social para culminarlo;al igual que el Centro de Convenciones y el Distrito de Riego.

Los primeros lugares durante todo el sexenio en educación y vivienda; el mejor manejo de la deuda, aunque desvirtuada por muchos actores políticos, reconocido por todas las calificadoras internacionales, en fin.

Hoy me sumo con la misma convicción que hace ya más de quince años al panismo, donde estoy llamado a cumplir con mi vocación política. Mi terquedad, mi perseverancia por este organismo es la mejor muestra de la solidez de la visión que comparto con Aguascalientes: que no vemos los problemas como señales de alto en el camino; sino como indicaciones precisas de por dónde hay que ir, a qué velocidad, con cuánta precaución.

A pesar de los baches que representen esos malos líderes, que se sienten semáforos y no pasan de ser baches, o cuando mucho, unos molestos topes…

Baches que sólo impiden la libre circulación de ideas, de propuestas y de iniciativas, baches que tienen nombre y cara.

Dicen que la política es tan intensa y complicada como la guerra, con una gran diferencia. En la guerra, te matan sólo una vez y te quedas muerto. En la política, nunca debe darse a nadie por muerto.

Vamos a construir y proponer. No más destrucción, no más divisiones que nos debilitan.

Hay mucho y muy urgente trabajo en Acción Nacional. Vemos con esperanza este momento porque aquí se puede avanzar hacia la esperada unidad y, como un integrante más, voy a luchar por ella con todas mis capacidades y toda mi pasión.

Muchas gracias”.