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Ejecutan a Balazos a un Joven en Potreros del Oeste

22 junio 2015

EJECUTADO

Fuente: OEM

En menos de 24 horas se registró una nueva ejecución, luego de que un joven que se encontraba lavando su automóvil convertible, fue asesinado arteramente de tres balazos, dos en la cabeza y uno en el pecho.

Los autores del sanguinario crimen fueron cuatro individuos quienes huyeron en un auto Nissan, el cual abandonaron calles más adelante donde habían dejado otra unidad para hacer el clásico traslado.

Los hechos se registraron ayer minutos antes de las cuatro de la tarde cuando la víctima, identificada como Román Antonio Gutiérrez Hermosillo, de 29 años, quien tuvo su último domicilio en la calle Andador Crepúsculo número 137, en Potreros del Oeste, se encontraba lavando su auto convertible marca Chrysler Sebring, color verde, con placas AFG-92-47.

Según las primeras investigaciones llevadas a cabo en el lugar del asesinato llevadas a cabo por elementos del Grupo Homicidios de la Policía Ministerial, los responsables del ataque fueron cuatro individuos que viajaban a bordo de un auto de la marca Nissan Tsuru II, repintado en color blanco, modelo 1989 y placas de circulación AFA-31-18.

Dicho vehículo fue encontrado abandonado, en la calle Abraham González, de la colonia Insurgentes y resultó ser propiedad de María Guadalupe López González, que tiene su domicilio en la colonia López Portillo, progenitora de distribuidor de drogas José de Jesús Martínez López, alias «La Liebre» de 38 años, que fue ejecutado en el mes de enero del 2010.

El sábado, poco antes de las cuatro de la tarde, el joven Román Antonio se encontraba frente a su casa lavando su auto convertible color verde.

De pronto arribó al lugar un auto Nissan Tsuru, en el que viajaban cuatro individuos, dos de los cuales vestían batas blancas como las que usan los laboratoristas y uno de ellos se dirigió hacia Román, pero al estar a corta distancia, desenfundó un arma de fuego calibre .38 y le disparó en al menos cuatro ocasiones, haciendo blanco los proyectiles en la cabeza y en el pecho.

Román cayó muerto instantáneamente mientras que los dos sujetos que habían bajado del Nissan, se subieron y se alejaron a gran velocidad, rumbo a la avenida Siglo XXI con dirección a la colonia Insurgentes.

En el cruce de J. Isabel Robles y Rosita Quintana, arrojaron una de las batas que habían usado durante la ejecución.

Luego se incorporaron hacia la calle Abraham González y en el cruce con Ejército Insurgente, abandonaron el Nissan y sobre unas piedras en un lote baldío, dejaron otra bata y una sudadera, para continuar la fuga, ignorándose si lo hicieron en otro vehículo o a pie tierra.

Mientras tanto, familiares del joven asesinado, al escuchar los disparos, salieron de la casa y al verlo tirado en el suelo, de inmediato solicitaron el auxilio de los servicios de emergencia, arribando paramédicos municipales quienes al llegar y auscultar el cuerpo, confirmaron que ya no presentaba signos vitales, por lo que requirieron la presencia del Agente del Ministerio Público, mientras que uniformados de la Policía Preventiva, acordonaban el área.

De inmediato se implementó un intenso operativo por parte de la Policía Ministerial y Municipal, así como de la Policía Estatal y minutos más tarde, durante la búsqueda de los homicidas, encontraron abandonado el Nissan Tsuru en el mencionado lugar.

Durante la inspección ocular, las autoridades investigadoras confirmaron que el auto era originalmente color azul, pero que lo habían repintado con aerosol en color blanco.

Mientras tanto, en el lugar del crimen, las autoridades hicieron el levantamiento del cuerpo para trasladarlo al Servicio Médico Forense, mientras que una grúa remolcó el auto convertible de la víctima para trasladarlo a los patios de la Policía Ministerial, así como el Nissan que utilizaron los sicarios.

Por su parte, elementos del Grupo Homicidios de la Policía Ministerial iniciaron las investigaciones para establecer las últimas actividades a las que se dedicaba Román Antonio e identificar a los homicidas.

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