Palestra Aguascalientes

Hombre Murió en la Calle Cuando Estaba en su Silla de Ruedas

11 noviembre 2015

Fuente: OEM

En circunstancias y condiciones que hicieron suponer se trataría de un caso más de suicidio, pero de manera atípica por su forma de consumarse, un individuo enfermo y postrado en silla de ruedas encontró la muerte en plena vía pública ayer por la tarde, cuando en apariencia se desplazaba por el frente de las antiguas instalaciones del bar Ocho Segundos, por el lado derecho de la calle José Reyes Martínez, a la altura de la finca 205, en la colonia Gremial, maniobrando el artefacto que utilizaba como medio de locomoción.

Los viandantes continuos de la zona y residentes del área, de inicio no se alertaron ante la acostumbrada presencia en ese lugar del minusválido Jorge Hernández Flores, de 47 años de edad, que radicara en la calle Tomás Medina Ugarte 123, en esa misma colonia Gremial, al considerar que como a diario lo hacía permanecería ahí, postrado en su silla de ruedas, a la espera de contar con los apoyos económicos que le eran proporcionados a quienes se los solicitaba.

Sin embargo, al filo de las tres de la tarde, varios transeúntes se percataron de la mala posición que guardaba el hombre en su silla de ruedas, aparentemente sujeto del cuello por la tela del suéter que vestía y cuyas mangas dijeron que estaban firmemente atadas a los manerales de ese artefacto, con sus piernas fuera de su sitio, casi rozando la banqueta, su cuerpo semi recostado en el asiento del aparato, con su brazo izquierdo por fuera de la silla y el derecho siguiendo la línea de su humanidad por la parte interna de la misma, que les hizo caer en cuenta que en apariencia «el enfermo había optado por la salida fácil», pero de una manera bastante atípica.

Así que optaron por dejar el asunto en manos de las autoridades ministeriales para que se procediera en consecuencia, se integraran las diligencias del caso y en base a las mismas, se deslindaran responsabilidades, previo a que los socorristas de la Cruz Roja confirmaran que el discapacitado sujeto había pasado a mejor vida, una vez que hubieran concluido con la valoración de su estado de salud.

A la intervención de los peritos médicos en el lugar de los hechos y a la somera inspección ocular que hicieran del cuerpo yerto, mencionaron que el hoy occiso, que para entonces ya había sido identificado a plenitud por quien fuera su hermana, el ama de casa María del Carmen Hernández Flores, de 45 años de edad, había dejado de existir a causa de fulminante infarto agudo al miocardio.

Pero para confirmar esa primera apreciación como causa de muerte del infortunado individuo, se dispuso del traslado de su cadáver a la morgue del Servicio Médico Forense, para la práctica de la necropsia de ley.